"Las piezas encajan" (resonar)

Nada es más impresionante que la idea de que cada cosas que existe está en el lugar que tiene que estar porque encaja con todo lo demás, tanto en espacio como en tiempo. Mis actos, mis pensamientos, emociones y sentimientos presentes, pasados y futuros encajan con todo lo demás que existe, tienen un lugar desde antes, desde siempre y para siempre. Cada piedra, flor, animal, nube existe en el lugar correcto para que la eternidad cumpla su propósito, un propósito ignorado pero del que participamos; un propósito que no necesitamos saber, solo cumplir y sentir una leve brisa de él por un instante en la vida. 

Ese pensamiento, de que cada cosa que se está realizando tiene su lugar, es fascinante, no puedes más que cerrar los ojos, pensarlo una vez y abandonarte a la sensación que detona ese pensamiento, maravillarte por dentro y abrir los ojos, comprobar que todo esto existe, aunque sea una ilusión —después de todo da lo mismo es si es real o una ilusión si para ti es y se siente real— mirarlo de frente. Yo formo parte del todo, en mi se realiza la existencia, se cumple el plan eterno. Ahora solo me queda respirar y salir alegre a cumplir con mi propósito, sin preocuparme tanto cuál es éste, solo dejarme llevar por la vibración y hacer lo que me dicta. Mi misión es elegir lo bueno, lo correcto, lo que vibra y resuena con el universo. Mi aspiración es resonar con el universo. ¿Qué más si no?