lunes, 9 de febrero de 2009

PalabrasyMediaHoraLibreFrenteAunGranuja

Los palurdos se aprovechan si hablas poco, sueltan toda su verborrea, eso lo se a ojos cerrados. La ventaja del Messenger es que puedes suprimir la “conversación” con quien sea en el momento que quieras y no tendras que verle a la cara. Jamas he entendido y jamas entendere la dinamica esa de platicar y activar la camara para que ambos parlantes se puedan ver. Es risiblemente bruto. Para mi eso es totalmente absurdo a menos que se trate de una mujer con quien platicas. El punto es que al principio, cuando uno empiezas a chatear llega a ser divertido como cuando se maneja un carro las primeras veces, o cuando se empieza a andar en bici o cualquier cosa que al principio cause una sensación agradable. Pero solo hacen falta unas cuantas conversaciones unos cuantos minutos con unos cuantos necios para desalentarse totalmente a hablar con nadie y no volverlo a intentar si no en momentos de extremo ocio. Ademas que es facil herir el ego de alguien de esa forma porque, como dije, se puede ignorar al indeseable interlocutor o al escribiente del otro lado de la computadora. Mas de una vez me he desinteresado en la platica y no he vuelto a contestar al individuo que cuando entro al chat me saluda y no recibe contestación de mi parte, en esas ocasiones, cuando me encuentro a tal tipo en carne y hueso, noto que he herido un poco su orgullo. Y todo viene a colación porque como todo el mundo sabe, guardo una guerra secreta con las maquinas y ellas me vedan sus secretos, asi que no me habia podido dar cuenta que existe una opcion para entrar como desconectado. Todo esto bajo la sombra de la voz desconcentradora en este mismo momento de un necio.

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